Si después de leer esta publicación, el lector no asume una actitud de cambio, que es el objetivo que inspira a cada párrafo acá expuesto, significa que se trata de alguien que aún no entiende el efecto nocivo de las críticas para la salud emocional y física. Ciertamente, mi experiencia en diferentes escenarios, me permite aseverar que he observado que no hay ambiente donde no se vea la enfermedad de la crítica, y, eso afecta por igual el trabajo, el vecindario, el hogar, e incluso el mismísimo recinto de las Iglesias de cualquier denominación: se trata de un “fenómeno” universal, multirracial, multicredo, la tendencia de los demás a criticar a sus semejantes. No voy a tratar la psicología de la crítica, porque REITERO (y ubico a cualquier nuevo lector) que el blog ENÉSIMA RESPUESTA tiene otra finalidad como es el lado de las llamadas RESPUESTAS CLICHÉS DIPLOMÁTICAS, orientadas en el caso de este post, a evadir cortés y elegantemente a quien te quiera envolver en la toxicidad de la crítica. Una breve acotación: la manera como actuamos nos define, y eso aplica a cuál va a ser tu actitud frente a la crítica, que sólo tú puedes decidir. Lo ideal, lo mejor, es la elegante discreción y honorable reconocimiento a la respetabilidad de tu prójimo.
En materia: no faltan personas quizás tímidas o muy temerosas que carecen de una idea clara de cómo evadir a un sujeto tóxico, o tal vez, se le hace difícil por cuestión de status jerárquico; es el caso cuando es un Jefe quien padece de la enfermedad de la criticosis, lo cual, ya no es de extrañar, porque ahora personajes de alta investidura, como Presidentes de naciones, se han dado a la toxicidad de enfrentar a sus adversarios políticos con críticas destructivas. No obstante, hay muchas maneras de evadir la tentación de entrar al terreno de la crítica. Esta publicación, te expone 20 fórmulas, que si bien no agotan el tema desarrollado, si da una buena base para enfrentar este problema. A continuación, ofrezco algunas respuestas clichés para cuando te critiquen o para cuando te quieran involucrar en la crítica a otra persona, y, quieras evadir con discreción, y elegante educación tal situación. 1.- En relación a esa crítica, no tengo detalles exactos de lo que dijo o de su intención. 2.- Creo que es su punto de vista y debe tener sólidas razones para decir eso, y no las conozco. 3.- Es probable que al opinar así, ud no tenía conocimiento sobre esa persona o sobre el hecho que está mencionando. 4.- A veces nos dejamos llevar por los impulsos, y lo que se dice o hace en esas circunstancias, no siempre es lo que mejor define a esa persona. 5.- Me gusta la frase “callado te ves mejor”. Me ciño a ella,
7.- Es preocupante lo que él dijo. Pero sólo él es responsable del resultado de sus palabras y para mí eso es más que suficiente, peso, o castigo, o consecuencia (como prefieras decirlo). 8.- Sin comentarios. 9.- Aunque discrepo de esa opinión que ud dio, no veo elegante opinar en ausencia de esa persona que está hablando porque no me agradaría una actitud semejante hacia mí. 10.- No tengo aún una opinión formada al respecto. Cuando la tenga, lo haré saber. Entretanto, el silencio es mi respuesta. 11.- Gracias por esa crítica. La tomaré en cuenta para mi mejoría en el futuro. 12.- No me enojas, pero si me decepciona tu opinión. Esperaba algo diferente, pero mejor así porque ya se a que atenerme. 13.- Percibo mucha emocionalidad en esa crítica. En esas circunstancias, opiniones adicionales pueden resultar inconvenientes. 14.- Mi relación de trabajo con ese compañero me impide moralmente dar una respuesta sobre esa opinión. 15.- No quiero entrar en polémicas innecesarias. Ya mañana el tema estará olvidado y lo que opine hoy será entonces redundante o innecesario. 16.- Por respeto a mis principios, me reservo mi opinión. 17.- Lamento no opinar sobre el tema, pero no quiero involucrarme ni que me involucren, en todo caso, solicito respeten mi decisión de reserva. 18.- Porque los quiero a todos por igual, incluso a ese compañero del que hablas, y pese a su opinión que no comparto del todo, prefiero reservarme mi punto de vista al respecto. 19.- Tu crítica aunque ácida, es un enfoque que no había considerado antes. Lo analizaré y en ausencia de conclusiones en este momento, elijo no hablar más de eso. 20.-Dios conoce su corazón y el mío. Que sea Dios quien juzgue y no yo, para no ser yo juzgado también por Dios.
____________________________________________________________ Con el numeral 20 finalizo este post, y, solo tres notas de cierre: 1.- No por gritar eres más fuerte o convincente, ni tampoco por criticar serás más persuasivo o más popular. 2.- La crítica es una actitud negativa y desleal hacia los demás. Te resta luz. Te hace igual o peor que quien te incita a criticar al prójimo, … ¡tú decides!!!!. 3.- Al criticar etiquetas. Si no deseas ser etiquetado de igual forma, evita etiquetar o desprestigiar a otro con tus críticas, o siendo condescendiente con las críticas que se hacen a otra persona.
