En Venezuela la Democracia es un valor social muy respetado y valorado, ¡A Dios gracias!. Y ciertamente se ha procurado respetar la "democracia electoral", pese a que los ganadores resultantes luego hagan de las suyas con hábiles artificios de manipuladora legalidad. Aún así, no es peor que otros países donde las diferencias se han arreglado a costa de miles de vidas (como ocurrió en Venezuela en épocas pasadas ya conocidas de nuestra historia). Esa cultura de Democracia electoral también ha estado acompañada de un discurso electoral muy característico y muy particularmente acentuado en este último decenio en algunos países latinoamericanos; de lo cual me ocupo en los párrafos que siguen.
Primeramente: Democracia electoral no es lo mismo que Democracia genuina. Porque comenzando por trampas fabricadas desde el máximo Organismo electoral que favorecen al partido de Gobierno, hasta amenazas a empleados públicos, hacen que la Democracia sea un simple juego de elecciones, donde posiblemente el ganador ni es el más idóneo "ni fue el que obtuvo más votos" dado que los filtros de las trampas y pactos secretos, dan a los votos "otro destino". Como dije antes, "esto es más pasable que decidirlo a costa de sangre y balas", y más aún, cuando existe el mecanismo de Referéndum (que tampoco está libre de esos vicios y trampas electorales).
Parte del juego sucio que algunos hábiles políticos practican en la Democracia electoral es el lenguaje manipulador, el cual siempre ha existido, pero desde hace una década, es groseramente insoportable cuando esas mentiras son financiadas con el patrimonio nacional de los venezolanos, dando a nuestras riquezas un uso improductivo que busca eternizar en el poder a los ineptos. Las riquezas de un país no son para financiar imágenes narcisistas de los gobernantes, sino para generar prosperidad a un país.
Crecí en una Venezuela de discursos demagógicos, cargados de promesas electorales faraónicas, ¡PEEEERO!, comparado a los asqueantes discursos de la actualidad, de pésimo verbo literario y absoluto irrespeto al contrincante y posterior derrotado, mi desagrado es aún mayor en la actualidad. En aquella época llegué a ver presidentes INAGURANDO OBRAS, hoy, eso es recuerdos del pasado por ausencia de obras para inaugurar.
Cuando escribo este post quiero que POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS nunca se olvide que un gobernante que se expresa con un asqueante verbo despectivo, ni puede pretender ser visto y valorado como un intelectual, ni MUCHISIMO menos pretenda aspirar a representar a las mentes de un país, porque yo no me siento representado por cada burro que he escuchado tras los micrófonos en este último decenio, todo lo contrario, siento pena ajena por la forma cómo nos deben ver en el extranjero, y no dudo que desde burlas hasta lástima sea lo que se recoja del hablar de esas mal llamadas "figuras de la vida pública nacional", ...Dios, ¡qué pena por ellos y qué verguenza para nuestra nación!.
Lo más triste es que Venezuela ha producido intelectuales de TALLA CONTINENTAL como Don Andrés Bello y Don Simón Rodríguez, y se me erizan los pelos de indignación cuando pienso en lo bajo que han llegado en la actualidad nuestros representantes de gobierno, y la "distancia intelectual" tan alejada entre esos célebres venezolanos de un pasado no tan lejano, y muchas de las mal llamadas "figuras de la vida pública nacional", desde alcaldes, gobernadores, diputados, concejales, representantes comunales, ..... presidente.
El discurso electoral de la actualidad lo primero que le denigro es su alto contenido ofensivo y de irrespeto al contrincante. Desde la desfigurada posición de la Presidencia se gestan discursos no sólo ofensivos sino vulgares, y para que sea más triste la situación, las respuestas aunque menos vulgares (no porque sean más educados, sino por un Organo Judicial parcializado que penaliza a los opositores), no demuestran tener mejor nivel intelectual. Porque si bien el empleo del verbo despectivo ya es criticable, la ACTITUD generalizada de OFENDER Y DESTRUIR ya crea un ambiente insano para el juego democrático. Por favor, no enseña la ética elemental "respeta para que te respeten", por cierto, muy dignamente representado este axioma en las victorias del Mariscal Sucre ante los vencidos, cuya figura se hace inmortal no sólo por sus triunfos épicos sino por el triunfo de mostrar al arrogante mundo europeo que en Venezuela "si se respeta al enemigo vencido", y corrijo, ¡eso se perdió en este desastroso decenio DIGNO DEL OLVIDO!, porque lo más triste es que estos pseudogobernantes se creen los únicos conocedores de nuestra historia, y son ellos el más deplorable ejemplo de lo que llamaría un "anti-personaje de la politica". Y: nunca antes conocí de algún presidente que se hubiera dedicado a ofender y atacar a propios y extraños, porque ni los mandatarios de otros países se han salvado del salvajismo discursivo que se "exhibe" desde Venezuela por parte de muchos de sus "altos funcionarios (?)".
Ese discurso electoral nos ha acostumbrado a las AMENAZAS. ¿Sale adelante un país amenazando a un sector importante del país?. Venezuela en el siglo XX alcanzó un admirable nivel de civilización, representado en políticos de talla intelectual como Rómulo Betancourt y Rafael Caldera (por sólo citar los más reconocidos), quienes dieron LECCION de cómo hacer "POLITICA CIVILIZADA", y su mayor lección estuvo, INSISTO EN ELLO, en el manejo de un verbo respetuoso y además, de respeto a la persona del opositor. Eso representan altos valores de moralidad muy necesarios para alimentar el juego democrático, y parece increíble que donde más se requiera eso sea en Venezuela, ¡semejante e imperdonable retroceso!. Las amenazas sólo conducen a generar miedo en las masas, pero, cuidado y no se convierta en un poderoso y peligroso efecto contrario en forma de "bola de nieve" inspirado en valor y patriotismo.
Y por cierto que otro aspecto ASQUEANTE del discurso de bajo nivel electoral de la actualidad es el MANEJO AL ESTILO NAZI de un discurso que pretende ser patriótico, y no pasa de ser patriotérico. Esa fantasía de lucha contra el Capitalismo y el Imperialismo es una absoluta y aberrante farsa: porque esos mismos gobernantes vacacionan en EEUU, compran lo más caro de la mercancia de EEUU en detrimento de la producción nacional, se ven en las clínicas de EEUU, y ¡venden nuestro petróleo a los EEUU!, a quien insanamente lo presentan como enemigo político más como recurso para engañar a la población que como una verdadera realidad, porque hay una doble cara de hipocresía, y lo digo porque no dejan de vender el petróleo a esos "imperialistas asesinos" cuyos dólares financian esta desquiciada forma de gobernar de enfrentamiento polarizado con los EEUU, ¿si tan malos y asesinos son los imperialistas, por qué venderles el petróleo con el que ellos argumentan que invaden otros países?, ¿no es esto un macabro discurso hipócrita?.
El discurso electoral de algunos mandatarios latinoamericanos fracasados, se caracteriza porque genera una insana división aglutinando al opositor en la triste y trillada metáfora de "representantes del imperialismo", que no fuera tan negativo sino fuera por esas horas, y horas, y horas, .......y horas! de idiotizante propaganda polarizada que busca estigmatizar a un sector de la población identificado como opositor, y que no han entendido que lo único que ha logrado esa propaganda idiotizante del gobierno, es que más opositores (mal llamados escuálidos) se sumen a esos mal llamados "representantes del imperialismo", porque ellos no son representantes de nadie, sino de sus propias ideas y convicciones, que no se han doblegado a la desquiciada forma de pensar del autócrata.
No menos tristes son las otras metáforas: "representantes de la rancia burguesía", ¡burdo cliché!, el cual es manejado sin mirar el rabo de paja del patrimonio de sus interlocutores quienes han acumulado en este decenio importantes fortunas, e indignamente son ellos quienes hablan "en defensa de los más pobres", jajajajajaja, ¡río para no llorar de indignación!, porque semejante PINOCHADA no se la creen ni ellos mismos, porque es imposible "tapar el sol con un dedo" en una Venezuela con tanto desabastecimiento y racionamientos, que en nada afecta a los más ricos que tienen poder para comprar en el extranjero, en cambio, si merma y mucho el presupuesto familiar de los más pobres. Los políticos mentirosos son políticos pinochines, y ¡reprobables!.
Por cierto, si el discurso electoral debe ser "aglutinador", ¿cómo entender entonces un discurso electoral encizañado contra la burguesía?. ¿Los burgueses no son también electores?. Mi análisis frívolo es este: "cualquier error del gobierno, o cualquier baja en la popularidad del gobernante, se le atribuirá a supuestos ataques desestabilizadores de la burguesía criolla y extranjera". Mi opinión: es tan hábil como macabra esa estrategia, ¡y cuán común es hoy día, en algunos mandatarios de Latinoamérica!.
Súmenle a ese discurso electoral manipulador y mentiroso la farsa de autoproclamarse "defensores de los pobres", de ¿cuáles pobres, los que simpatizan con el gobierno o los que les adversan?, porque la política actual se ha alejado tanto del juego democrático, que ser opositor es un estigma, y la famosa LISTA TASCON es la expresión más repugnante e IMPUNE de ese estilo de gobernar, la cual debería ser objeto de estudio en todas las Facultades de Política de nuestra América y del mundo, para que semejante monstruo que emula los procedimientos apartheid de política. ¡jamás se vuelva a repetir!, porque si bien la muerte libró a su autor a las sanciones por las injusticias cometidas, la historia en cambio no lo absolverá porque son miles de venezolanos los afectados por esa siniestra lista.
Realmente es triste que con un manejo verbal tan hueco con burdos clichés como "Representantes del imperialismo o de la burguesía", lleguen ineptos al poder. Porque ese discurso no ofrece ningún tipo de orientación estratégica de desarrollo nacional, ni siquiera al corto plazo; por favor, ¿cómo ganan con un discurso tan vacío?. Son políticos vestidos de ovejas con las agallas devoradoras de lobos rapaces predicadores de odio y que luego en períodos electorales disfrazan su lenguaje con frases de amor, ignorando que la gente ya sabe de sus corazones cargados de odios y complejos. Algo no debes dudar: "cuando al gobernante le va mal, le va a atribuir las causas de sus errores, al macabro imperialismo internacional", jajajajaja.El discurso electoral es un recurso muy importante del juego democrático y del arte de la política. Por eso es un tema muy interesante, y por tanto digno del mejor análisis político. En mi muy personal opinión, e inspirado en Caldera y Betancourt, ese discurso debe ser de altura, y eso no significa el manejo de "frases afrancesadas" sino el manejo de un verbo digno y respetuoso que lo convierta en vehículo ético del plan de gobierno de los aspirantes a gobernar. No estoy en contra del lenguaje coloquial, pero como todas las cosas en esta vida, hay escenarios propios para el uso del lenguaje coloquial, y otros escenarios propios para el lenguaje intelectual, y ¿sabes donde está el problema?, que el lenguaje intelectual sólo lo conocen los verdaderos intelectuales, por eso aplico acá aquello de "por sus frutos los conoceréis", de hecho, y enlazando con ideas previas, al lobo se le conoce por sus frutos, porque de un corazón cargado de odios no puedes esperar frutos de amor.No todo está perdido. En algún momento se producirá el necesario viraje político en Venezuela que rescate los verdaderos fundamentos éticos con los que nuestros "precursores originales" fundaron nuestro país, y enfatizo que Fidel Castro ni Che Guevara son precursores de nada en nuestra vida pasada, y la trayectoria de Che Guevara y Fidel se la dejo a Argentina y Cuba, y déjennos en Venezuela guiarnos por Simón Bolívar, Jose Antonio Sucre, Rafael Urdaneta, .... Andrés Bello, Simón Rodríguez,... Rafael Caldera, Rómulo Betancourt, ...... y........!!!, sólo el destino dará los siguientes nombres que lustren nuestra historia, pero no de mediocridad sino de brillantez.
El discurso electoral ofrece mucha "tela que cortar" para el estudio de respuestas clichés o enésimas respuestas, por eso dedico en este blog varios temas a esa manifestación de política. Hoy es más importante que ayer el estudio de esas CANTINFLADAS con las que convencen y engañan a tantos ingenuos. De hecho, Cantinflas se ve como "un gran intelectual" al lado de tanto mal llamado revolucionario bolivariano, porque Cantinflas es una figura no sólo cómica sino de contenido histórico de un pueblo humilde y heroico como los mejicanos, que exigen a gritos reivindicaciones sociales, y en su figura se hace ver a los gobernantes lo que aspiran y desean los mejicanos, y que pese a tener fronteras con EEUU, el gentilicio mejicano no se identifica con John Wayne o Jerry Lewis sino con héroes y figuras propias de México, desde Benito Juárez como político a Cantinflas como expresión genuina del verdadero mejicano humilde y sano. Por eso, no tengo nada contra Fidel y Ché, lo que sucede es que no puedo dejar que Fidel ocupe el lugar de Bolivar o que el Che ocupe el lugar del insigne e ilustrísimo Jose Maria Vargas, ¿será que se entiende lo que es sentir verdadero orgullo nacional por nuestras verdaderas figuras nacionales?. Que tristeza que muchos países quisieran contar entre sus hijos a un Jose María Vargas, y acá no saben nada de él y en cambio se exige el estudio del Ché. ¿es esa asqueante alienación lo que ellos venden como Revolución Bolivariana?, ¿no será más apropiado llamarla revolución castrista, dado que su figura no es Bolívar sino Castro y el Ché?....; Dios, ¡perdónalos porque no saben lo que hacen!.
Recomendación sana a los lectores: Si quienes nos gobiernan no quieren copiar la ética de Bolívar o de Betancourt, .... cópien entonces la de Cantinflas, ¡porque hace menos daño!. No crean que estoy desvariando: es que prefiero que mis nietos escuchen las sanas pistoladas de Cantinflas, antes que los acomplejados y venenosos discursos de quienes hoy gobiernan Venezuela (de hecho, crecí viendo las películas de Cantinflas, cuyos mensajes de humildad son mejores que los del odio actual). Y no se preocupen, que los venezolanos de a pié sí sabemos quiénes son nuestros verdaderos y genuinos próceres, y cuáles son nuestros verdaderos y genuinos valores morales e históricos, que en ninguna forma tienen algo que ver con el mensaje de odio polarizado que se quiere inyectar en el pueblo venezolano.
Primeramente: Democracia electoral no es lo mismo que Democracia genuina. Porque comenzando por trampas fabricadas desde el máximo Organismo electoral que favorecen al partido de Gobierno, hasta amenazas a empleados públicos, hacen que la Democracia sea un simple juego de elecciones, donde posiblemente el ganador ni es el más idóneo "ni fue el que obtuvo más votos" dado que los filtros de las trampas y pactos secretos, dan a los votos "otro destino". Como dije antes, "esto es más pasable que decidirlo a costa de sangre y balas", y más aún, cuando existe el mecanismo de Referéndum (que tampoco está libre de esos vicios y trampas electorales).
Parte del juego sucio que algunos hábiles políticos practican en la Democracia electoral es el lenguaje manipulador, el cual siempre ha existido, pero desde hace una década, es groseramente insoportable cuando esas mentiras son financiadas con el patrimonio nacional de los venezolanos, dando a nuestras riquezas un uso improductivo que busca eternizar en el poder a los ineptos. Las riquezas de un país no son para financiar imágenes narcisistas de los gobernantes, sino para generar prosperidad a un país.
Crecí en una Venezuela de discursos demagógicos, cargados de promesas electorales faraónicas, ¡PEEEERO!, comparado a los asqueantes discursos de la actualidad, de pésimo verbo literario y absoluto irrespeto al contrincante y posterior derrotado, mi desagrado es aún mayor en la actualidad. En aquella época llegué a ver presidentes INAGURANDO OBRAS, hoy, eso es recuerdos del pasado por ausencia de obras para inaugurar.
Cuando escribo este post quiero que POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS nunca se olvide que un gobernante que se expresa con un asqueante verbo despectivo, ni puede pretender ser visto y valorado como un intelectual, ni MUCHISIMO menos pretenda aspirar a representar a las mentes de un país, porque yo no me siento representado por cada burro que he escuchado tras los micrófonos en este último decenio, todo lo contrario, siento pena ajena por la forma cómo nos deben ver en el extranjero, y no dudo que desde burlas hasta lástima sea lo que se recoja del hablar de esas mal llamadas "figuras de la vida pública nacional", ...Dios, ¡qué pena por ellos y qué verguenza para nuestra nación!.
Lo más triste es que Venezuela ha producido intelectuales de TALLA CONTINENTAL como Don Andrés Bello y Don Simón Rodríguez, y se me erizan los pelos de indignación cuando pienso en lo bajo que han llegado en la actualidad nuestros representantes de gobierno, y la "distancia intelectual" tan alejada entre esos célebres venezolanos de un pasado no tan lejano, y muchas de las mal llamadas "figuras de la vida pública nacional", desde alcaldes, gobernadores, diputados, concejales, representantes comunales, ..... presidente.
El discurso electoral de la actualidad lo primero que le denigro es su alto contenido ofensivo y de irrespeto al contrincante. Desde la desfigurada posición de la Presidencia se gestan discursos no sólo ofensivos sino vulgares, y para que sea más triste la situación, las respuestas aunque menos vulgares (no porque sean más educados, sino por un Organo Judicial parcializado que penaliza a los opositores), no demuestran tener mejor nivel intelectual. Porque si bien el empleo del verbo despectivo ya es criticable, la ACTITUD generalizada de OFENDER Y DESTRUIR ya crea un ambiente insano para el juego democrático. Por favor, no enseña la ética elemental "respeta para que te respeten", por cierto, muy dignamente representado este axioma en las victorias del Mariscal Sucre ante los vencidos, cuya figura se hace inmortal no sólo por sus triunfos épicos sino por el triunfo de mostrar al arrogante mundo europeo que en Venezuela "si se respeta al enemigo vencido", y corrijo, ¡eso se perdió en este desastroso decenio DIGNO DEL OLVIDO!, porque lo más triste es que estos pseudogobernantes se creen los únicos conocedores de nuestra historia, y son ellos el más deplorable ejemplo de lo que llamaría un "anti-personaje de la politica". Y: nunca antes conocí de algún presidente que se hubiera dedicado a ofender y atacar a propios y extraños, porque ni los mandatarios de otros países se han salvado del salvajismo discursivo que se "exhibe" desde Venezuela por parte de muchos de sus "altos funcionarios (?)".
Ese discurso electoral nos ha acostumbrado a las AMENAZAS. ¿Sale adelante un país amenazando a un sector importante del país?. Venezuela en el siglo XX alcanzó un admirable nivel de civilización, representado en políticos de talla intelectual como Rómulo Betancourt y Rafael Caldera (por sólo citar los más reconocidos), quienes dieron LECCION de cómo hacer "POLITICA CIVILIZADA", y su mayor lección estuvo, INSISTO EN ELLO, en el manejo de un verbo respetuoso y además, de respeto a la persona del opositor. Eso representan altos valores de moralidad muy necesarios para alimentar el juego democrático, y parece increíble que donde más se requiera eso sea en Venezuela, ¡semejante e imperdonable retroceso!. Las amenazas sólo conducen a generar miedo en las masas, pero, cuidado y no se convierta en un poderoso y peligroso efecto contrario en forma de "bola de nieve" inspirado en valor y patriotismo.
Y por cierto que otro aspecto ASQUEANTE del discurso de bajo nivel electoral de la actualidad es el MANEJO AL ESTILO NAZI de un discurso que pretende ser patriótico, y no pasa de ser patriotérico. Esa fantasía de lucha contra el Capitalismo y el Imperialismo es una absoluta y aberrante farsa: porque esos mismos gobernantes vacacionan en EEUU, compran lo más caro de la mercancia de EEUU en detrimento de la producción nacional, se ven en las clínicas de EEUU, y ¡venden nuestro petróleo a los EEUU!, a quien insanamente lo presentan como enemigo político más como recurso para engañar a la población que como una verdadera realidad, porque hay una doble cara de hipocresía, y lo digo porque no dejan de vender el petróleo a esos "imperialistas asesinos" cuyos dólares financian esta desquiciada forma de gobernar de enfrentamiento polarizado con los EEUU, ¿si tan malos y asesinos son los imperialistas, por qué venderles el petróleo con el que ellos argumentan que invaden otros países?, ¿no es esto un macabro discurso hipócrita?.
El discurso electoral de algunos mandatarios latinoamericanos fracasados, se caracteriza porque genera una insana división aglutinando al opositor en la triste y trillada metáfora de "representantes del imperialismo", que no fuera tan negativo sino fuera por esas horas, y horas, y horas, .......y horas! de idiotizante propaganda polarizada que busca estigmatizar a un sector de la población identificado como opositor, y que no han entendido que lo único que ha logrado esa propaganda idiotizante del gobierno, es que más opositores (mal llamados escuálidos) se sumen a esos mal llamados "representantes del imperialismo", porque ellos no son representantes de nadie, sino de sus propias ideas y convicciones, que no se han doblegado a la desquiciada forma de pensar del autócrata.
No menos tristes son las otras metáforas: "representantes de la rancia burguesía", ¡burdo cliché!, el cual es manejado sin mirar el rabo de paja del patrimonio de sus interlocutores quienes han acumulado en este decenio importantes fortunas, e indignamente son ellos quienes hablan "en defensa de los más pobres", jajajajajaja, ¡río para no llorar de indignación!, porque semejante PINOCHADA no se la creen ni ellos mismos, porque es imposible "tapar el sol con un dedo" en una Venezuela con tanto desabastecimiento y racionamientos, que en nada afecta a los más ricos que tienen poder para comprar en el extranjero, en cambio, si merma y mucho el presupuesto familiar de los más pobres. Los políticos mentirosos son políticos pinochines, y ¡reprobables!.
Por cierto, si el discurso electoral debe ser "aglutinador", ¿cómo entender entonces un discurso electoral encizañado contra la burguesía?. ¿Los burgueses no son también electores?. Mi análisis frívolo es este: "cualquier error del gobierno, o cualquier baja en la popularidad del gobernante, se le atribuirá a supuestos ataques desestabilizadores de la burguesía criolla y extranjera". Mi opinión: es tan hábil como macabra esa estrategia, ¡y cuán común es hoy día, en algunos mandatarios de Latinoamérica!.
Súmenle a ese discurso electoral manipulador y mentiroso la farsa de autoproclamarse "defensores de los pobres", de ¿cuáles pobres, los que simpatizan con el gobierno o los que les adversan?, porque la política actual se ha alejado tanto del juego democrático, que ser opositor es un estigma, y la famosa LISTA TASCON es la expresión más repugnante e IMPUNE de ese estilo de gobernar, la cual debería ser objeto de estudio en todas las Facultades de Política de nuestra América y del mundo, para que semejante monstruo que emula los procedimientos apartheid de política. ¡jamás se vuelva a repetir!, porque si bien la muerte libró a su autor a las sanciones por las injusticias cometidas, la historia en cambio no lo absolverá porque son miles de venezolanos los afectados por esa siniestra lista.
Realmente es triste que con un manejo verbal tan hueco con burdos clichés como "Representantes del imperialismo o de la burguesía", lleguen ineptos al poder. Porque ese discurso no ofrece ningún tipo de orientación estratégica de desarrollo nacional, ni siquiera al corto plazo; por favor, ¿cómo ganan con un discurso tan vacío?. Son políticos vestidos de ovejas con las agallas devoradoras de lobos rapaces predicadores de odio y que luego en períodos electorales disfrazan su lenguaje con frases de amor, ignorando que la gente ya sabe de sus corazones cargados de odios y complejos. Algo no debes dudar: "cuando al gobernante le va mal, le va a atribuir las causas de sus errores, al macabro imperialismo internacional", jajajajaja.El discurso electoral es un recurso muy importante del juego democrático y del arte de la política. Por eso es un tema muy interesante, y por tanto digno del mejor análisis político. En mi muy personal opinión, e inspirado en Caldera y Betancourt, ese discurso debe ser de altura, y eso no significa el manejo de "frases afrancesadas" sino el manejo de un verbo digno y respetuoso que lo convierta en vehículo ético del plan de gobierno de los aspirantes a gobernar. No estoy en contra del lenguaje coloquial, pero como todas las cosas en esta vida, hay escenarios propios para el uso del lenguaje coloquial, y otros escenarios propios para el lenguaje intelectual, y ¿sabes donde está el problema?, que el lenguaje intelectual sólo lo conocen los verdaderos intelectuales, por eso aplico acá aquello de "por sus frutos los conoceréis", de hecho, y enlazando con ideas previas, al lobo se le conoce por sus frutos, porque de un corazón cargado de odios no puedes esperar frutos de amor.No todo está perdido. En algún momento se producirá el necesario viraje político en Venezuela que rescate los verdaderos fundamentos éticos con los que nuestros "precursores originales" fundaron nuestro país, y enfatizo que Fidel Castro ni Che Guevara son precursores de nada en nuestra vida pasada, y la trayectoria de Che Guevara y Fidel se la dejo a Argentina y Cuba, y déjennos en Venezuela guiarnos por Simón Bolívar, Jose Antonio Sucre, Rafael Urdaneta, .... Andrés Bello, Simón Rodríguez,... Rafael Caldera, Rómulo Betancourt, ...... y........!!!, sólo el destino dará los siguientes nombres que lustren nuestra historia, pero no de mediocridad sino de brillantez.
El discurso electoral ofrece mucha "tela que cortar" para el estudio de respuestas clichés o enésimas respuestas, por eso dedico en este blog varios temas a esa manifestación de política. Hoy es más importante que ayer el estudio de esas CANTINFLADAS con las que convencen y engañan a tantos ingenuos. De hecho, Cantinflas se ve como "un gran intelectual" al lado de tanto mal llamado revolucionario bolivariano, porque Cantinflas es una figura no sólo cómica sino de contenido histórico de un pueblo humilde y heroico como los mejicanos, que exigen a gritos reivindicaciones sociales, y en su figura se hace ver a los gobernantes lo que aspiran y desean los mejicanos, y que pese a tener fronteras con EEUU, el gentilicio mejicano no se identifica con John Wayne o Jerry Lewis sino con héroes y figuras propias de México, desde Benito Juárez como político a Cantinflas como expresión genuina del verdadero mejicano humilde y sano. Por eso, no tengo nada contra Fidel y Ché, lo que sucede es que no puedo dejar que Fidel ocupe el lugar de Bolivar o que el Che ocupe el lugar del insigne e ilustrísimo Jose Maria Vargas, ¿será que se entiende lo que es sentir verdadero orgullo nacional por nuestras verdaderas figuras nacionales?. Que tristeza que muchos países quisieran contar entre sus hijos a un Jose María Vargas, y acá no saben nada de él y en cambio se exige el estudio del Ché. ¿es esa asqueante alienación lo que ellos venden como Revolución Bolivariana?, ¿no será más apropiado llamarla revolución castrista, dado que su figura no es Bolívar sino Castro y el Ché?....; Dios, ¡perdónalos porque no saben lo que hacen!.
Recomendación sana a los lectores: Si quienes nos gobiernan no quieren copiar la ética de Bolívar o de Betancourt, .... cópien entonces la de Cantinflas, ¡porque hace menos daño!. No crean que estoy desvariando: es que prefiero que mis nietos escuchen las sanas pistoladas de Cantinflas, antes que los acomplejados y venenosos discursos de quienes hoy gobiernan Venezuela (de hecho, crecí viendo las películas de Cantinflas, cuyos mensajes de humildad son mejores que los del odio actual). Y no se preocupen, que los venezolanos de a pié sí sabemos quiénes son nuestros verdaderos y genuinos próceres, y cuáles son nuestros verdaderos y genuinos valores morales e históricos, que en ninguna forma tienen algo que ver con el mensaje de odio polarizado que se quiere inyectar en el pueblo venezolano.
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