Angel Paz

Angel Paz

domingo, 9 de junio de 2013

54. Táctica de RECONOCER al otro.



Mucha gente es temerosa para hablar en público, y hay quienes ven con más temor esa circunstancia, cuando se trata de dar unas palabras en ocasión de un reconocimiento por méritos profesionales. Porque definitivamente lo que se diga ante ese auditorio, dirá mucho acerca de la personalidad de la persona agasajada, justificando esto la importancia de contar con la “frase de bolsillo” apropiada para esas ocasiones; y, no siendo quizás la única, si les puedo asegurar que es muy eficaz la respuesta que analizaré en el posterior desarrollo, y, por tanto constituye una excelente elección en tus búsquedas y consultas de internet en cuanto a respuestas para ocasiones. Sigue la lectura, y luego tú decides.

He escuchado con muchisísima frecuencia la respuesta de bolsillo siguiente: “Este reconocimiento es para todo el equipo humano que ha permitido llevar adelante mi trabajo, y permitirme figurar de forma que se premie esta labor” (palabras más, palabras menos), es decir, hago referencia a la frase donde el agasajado recurre a la táctica expresiva de extender el mérito del logro, a todas las personas que lo apoyaron para concretar ese logro.

En más de una ocasión he visto a personas que buscan el asesoramiento de las palabras oportunas para reflejar un éxito (político, deportivo, universitario, etc), y la ocasión puede variar, desde unas palabras en virtud de una graduación de profesionales, hasta unas palabras para referir el éxito luego de un juego deportivo recién ganado, y, en ocasiones semejantes, el extender el mérito al equipo será bien recibido. Esa búsqueda se ha extendido en la actualidad a la consulta en internet de esas palabras adecuadas para ocasiones.

Muchas veces habrán escuchado a algún futbolista famoso que es premiado y reconocido públicamente de alguna forma, el expresar que el triunfo de su equipo, más que por el gol que anotó y dió la victoria, es debido al trabajo engranado de todos los jugadores que siguieron al pié de la letra las instrucciones del técnico, ¡Oportunísimo verdad!, y aunque algunos no lo vean tan sincero tal gesto, les aseguro que tales palabras siempre serán bien recibidas, y, por tal motivo hago escogencia de las mismas para traerlas al desarrollo temático de este blog.
Incluso, en la entrega de premios Oscar a artistas destacados, en más de una ocasión, le he escuchado a algún artista agasajado, el uso del reconocimiento al equipo (camarógrafos, coreógrafos, maquilladores, etc) como forma de expresar en ese auditorio de famosos, lo que considera más sincero o más oportuno para esa ocasióm. La moraleja es obvia: si lo usan los famosos, quiere decir que se trata de una táctica o recurso expresivo muy útil para esos menesteres; hasta podría decirse que es una famosa táctica, empleada por los más famosos.
Muy posiblemente el uso de esa táctica, resulta de una persona realmente humilde y agradecida; también puede ser empleada, más que por humildad, por usanza protocolar propia para esas circunstancias, y, para muchos resulta muy efectiva y elogiable, aún cuando en algunos casos la falta de sinceridad deje ver cierta hipocresía en su usanza, pero insisto, nadie objetará que es una expresión adecuada a la circunstancia.
Debe quedar claro, que en una situación de dar unas palabras en virtud de un reconocimiento profesional, lo importante no es la extensión sino la cualidad del mensaje, porque en pocas palabras, siempre que sean las acertadas y propicias, se puede decir todo lo que se corresponde al momento. Por tal motivo, encuentro cualidades positivas en la respuesta que analizo en este post, porque una respuesta como esta: “¡agradecido con todo el equipo, quienes también son merecedores de este reconocimiento!”, es decir, con apenas una docena de palabras, se dice lo necesario, lo oportuno, lo merecido, lo justo.

Quiero compartir con mis lectores lo que fue mi primera experiencia ante un auditorio. Y fue cuando dí mi primer sermón en la iglesia evangélica, que a pesar de tener un papel con las ideas anotadas que quería exponer, una vez que tuve de frente a la gente, el efecto fue casi inmediato: empecé a sudar y sentí la desagradable experiencia de sentir que no podía hablar y que la mente la tenía en blanco; era como si mi papel de notas no existiera. En situaciones así, es cuando se hacen útiles los recursos expresivos de este blog. Si alguien me hubiera sugerido este post en ese momento, sin dudarlo hubiera dicho algo como: “agradezco a Dios esta oportunidad de transmitir su palabra”, y, tengan por seguro que esa introducción, tan breve pero tan significativa en una auditorio así, será siempre bien recibida.
En este post quiero exponer la importancia de RECONOCER al otro, y, es tal su efecto, que me llama la atención que se trata de un verbo que se lee igual tanto de derecha a izquierda, como en el sentido contrario (de izquierda a derecha). Reconocer es importante no sólo en los casos de recibir un trofeo o reconocimiento público, sino en otras circunstancias como las que acá desarrollo. Pongan por favor atención a las palabras que dice una persona cuando recibe una medalla, trofeo o agasajo, y, descubrirán que en un alto porcentaje de casos se escuchará de esa persona alguna expresión donde extiende el reconocimiento del éxito, a su equipo de trabajo.
Una forma de ver la aplicación de la táctica acá analizada es cuando el agasajado (deportista, politico, etc) dice: “Agradezco a Dios por este logro”, lo cual es muy cristiano y muy loable, y siempre será bien recibido este mensaje. Ustedes mismos comprabarán como políticos, deportistas, profesionales, siempre acudirán a esa frase en algún momento que tengan que dar o hacer alguna declaración pública.
También cabe resaltar la extensión del mérito al apoyo familiar, en la expresión siguiente: “sin el apoyo y consejo de mis padres, no hubiera sido posible este logro”, y, además de adecuado, es un mensaje de agradecimiento que no sólo verá bien el público, sino incluso la misma familia. Podría agregar una opinión muy personalísima: creo que siempre será bien recibido el hacer reconocimiento público a nuestros padres, ya que ellos lo merecen.
Me llama la atención en actos de graduación, que el orador escogido por los graduandos haga reconocimiento público primeramente a la Universidad (apropiadísima la táctica para esa ocasión, además de lógica escogencia verbal), y no falta el reconocimiento a algún profesor que mostró especial esmero por sus alumnos durante su preparación de pregrado, lo cual también es muy bien visto por el cuerpo de profesores.


Además, estoy seguro que muchos de mis lectores en alguno de los actos protocolares de su empresa, alguna vez habrán oído algo semejante a esto: “Agradezco a la Jefatura del Departamento por la confianza y apoyo depositadas en nosotros para poder llevar a cabo este proyecto”, siendo muy agradables tales palabras a los directivos de la empresa. O incluso palabras como las siguientes: "este reconocimiento es también para todo ese equipo de profesionales que me acompañó en este proyecto". Recuerdan palabras semejantes a esas en actos del día del trabajador o en cenas navideñas de la empresa, donde el empleado a cargo de las palabras dice algo como: “Nuestro agradecimiento a la empresa por darnos la oportunidad de prestar servicio en tan distinguida plantilla de profesionales”, y, cuando veo el rostro de directivos y empleados, siempre he captado la buena impresión que generan esas palabras.
¿Se pueden ustedes imaginar la importancia de rescatar en el discurso político el empleo de la táctica de RECONOCER al otro?. Porque si prestan atención al lenguaje de los POLITIQUEROS de la actualidad, observarán cuanta mediocridad sale de sus bocas, descalificando e insultando al oponente, generando negativos efectos sociales entre grupos sociales que se identifican ideológicamente en un bando,enfrentando al otro bando que los insulta. ¿Será que le pueden recomendar la lectura de este post a esos personeros públicos que suelen escupir todo tipo de ofensas ante un micrófono?.
Incluso, debo decir que este post aplica muy bien en aquellos casos donde hay que emitir una declaración que involucre al bando derrotado. Esto se verifica cuando el técnico de un equipo de fútbol que recién acaba de ganar un partido, en la posterior rueda de prensa declara que el equipo perdedor fue un honorable contendor; por supuesto, sería muy galante también, si el candidato que resulta ganador en elecciones presidenciales tuviera un gesto similar.
Es que incluso en las relaciones interpersonales cotidianas, se puede resaltar la importancia de RECONOCER al otro. Recuerdan cuando le dijeron a la chica que hoy es su esposa: “me agrada y me honra tu compañía, y, nada me da más felicidad”. O al amigo, cuando le dicen: “tu apoyo fue decisivo para salir adelante, y haber llegado hasta donde hoy estoy”.


Refiero como táctica a las variantes expresivas de reconocimiento, porque no todo el mundo tiene las palabras necesarias para dirigirse a un auditorio, y, el escoger las más adecuadas, puede resultar un lío emocional, de manera que el tema acá abordado ofrece un escape expresivo, que además de breve (apropiadísimo para los nerviosos a hablar en público), es muy efectivo.
No soy un experto en Oratoria, pero he tenido vasta experiencia de hablar en público (sermones evangélicos, clases en Universidad, etc) , y, he experimentado tanto el sinsabor de las críticas, como el néctar de los halagos, ante uno y otro discurso o sermón. Este post no pretende ser una luminaria experta, pero se ha escrito con la mejor intención de ayudar a quienes en algún momento se les presentará la desagradable circunstancia de estar ante un auditorio y sentirse frenados, en cuyo caso, reconocer a Dios, a los padres, a los amigos, será una excelente válvula para calmar la ansiedad y para dar inicio a nuestras palabras.
Recuerden: Toda persona debe contar, además de su legajo profesional, con ese recurso espiritual y ético que lo haga merecedor del respeto y reconocimiento general dentro de su entorno, y, la humildad es parte de esa condición espiritual que debe sobresalir ante un éxito público, siendo la táctica del “reconocimiento al equipo de trabajo” una forma de expresar humildad, agradecimiento, y acertado empleo de recursos expresivos en un auditorio. En forma concreta y para cerrar este post: si no tienes palabras para decir en una auditorio, busca la manera de expresar agradecimiento a alguien, sea Dios, tus padres, tus amigos, porque siempre existirá alguien a quien quieras agradecer, y siempre, siempre, pero siempre, serán bien recibidas esas palabras humildes de agradecimiento, razón por la cual desarrollé este post, que espero haya dejado alguna utilidad a mis lectores.

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El autor de este blog, "RECHAZA":

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